En el marco del mes de las enfermedades reumáticas y el día mundial de la artritis reumatoidea, los especialistas insisten en la importancia de un diagnóstico temprano para disminuir las posibles secuelas que puede traer la falta de un tratamiento a tiempo. Según los datos de una encuesta realizada en América Latina, los pacientes con artritis reumatoidea experimentan los síntomas durante dos años antes de ser diagnosticados y consultan por primera vez a un reumatólogo cinco meses después de confirmar que padecen dicha enfermedad.
“Nuestro principal objetivo es que los pacientes con artritis reumatoidea lleguen lo más rápido posible a la consulta con el reumatólogo. Debemos aprovechar lo que se denomina ´ventana de oportunidad´, que son los primeros meses, entre los 3 y los 5, desde que se inician los síntomas hasta que el paciente comienza con el tratamiento”, afirmó el Dr. Oscar Rillo, jefe del Servicio de Reumatología del Hospital Pirovano y miembro de la comisión directiva de la Sociedad Argentina de Reumatología (SAR). Según el especialista, un retraso aún de pocas semanas “implica la pérdida de la posibilidad de obtener mejores resultados”.
Según explicó el Dr. Rillo, el acceso al diagnóstico cambió positivamente pero todavía debe mejorarse: “en los últimos años hemos logrado generar una mayor conciencia y esto afortunadamente nos permitió reducir el tiempo en el que los pacientes llegan a la consulta con el reumatólogo. Históricamente podían pasar hasta 14 meses y en la actualidad estamos en un promedio aproximado de 6 meses. De todas formas, lo ideal es seguir reduciendo este tiempo ya que cuanto antes lleguen al diagnóstico podremos brindar un tratamiento adecuado y por lo tanto contar con una mayor posibilidad de éxito”.
Cuando la artritis reumatoidea no se trata a tiempo, puede generar discapacidad y graves consecuencias en la vida cotidiana del paciente. “Un mismo tratamiento aplicado durante esta ´ventana de oportunidad´, es decir en un estadío temprano, tiene una mayor posibilidad de éxito que el mismo tratamiento aplicado tardíamente cuando la enfermedad ya avanzó. Los pacientes con artritis reumatoidea deterioran rápidamente su estado de salud. Un retraso en el tratamiento, y sobre todo fuera del período de ventana, implica un mayor daño radiológico y una menor capacidad para que sus articulaciones funcionen normalmente. La enfermedad progresará en daño articular, deformidad y discapacidad” aclaró el Dr. Rillo.
Para el especialista, la demora en la consulta con el reumatólogo podría explicarse en el desconocimiento de las características propias o la confusión con otras enfermedades, “a pesar de ser frecuentes y tener un alto impacto en la calidad de vida, las enfermedades reumatológicas son desconocidas y en muchos casos, confundidas. Esto se debe, probablemente, a la creencia o al mito de que sólo afectan a personas mayores”.
La artritis reumatoidea puede afectar a cualquier persona de cualquier sexo, aunque es más frecuente en las mujeres. Si bien es más común entre las personas de mayor edad, puede afectar también a niños y jóvenes.
La artritis reumatoidea (AR) en general comienza de manera lenta y se manifiesta con:
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Rigidez, dolor e hinchazón en las articulaciones, como manos y pies, durante las primeras horas de la mañana. También puede afectar rodillas, tobillos, codos y otras articulaciones.
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Sensación de debilidad generalizada y fatiga.
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Con menor frecuencia puede provocar fiebre.
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La rigidez mejora con el movimiento y la actividad física. Empeora con el reposo prolongado.
En algunos casos, las personas con artritis reumatoidea pueden presentar
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Compromiso cardíaco y pulmonar ya que se pueden inflamar los revestimientos que rodean al corazón (pericarditis) y a los pulmones (pleuritis).
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Resequedad en ojos y boca (síndrome de sjögren) porque se inflaman las glándulas lacrimógenas y salivares
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Inflamación de los vasos sanguíneos (vasculitis)
La anemia (bajo recuento de glóbulos rojos) aparece también como otro indicador de esta enfermedad.
“Los pacientes inician sus síntomas en forma progresiva. Aparece el dolor y la hinchazón en las pequeñas articulaciones de las manos, como pueden ser los nudillos, y con el avance de la enfermedad aumenta el dolor y el número de articulaciones comprometidas (muñecas, codos, rodillas). Es frecuente la presencia de malestar general, que incluye la sensación de dolor con los movimientos de la respiración, de ´arenilla´ en los ojos y también de boca seca” agregó el Dr. Rillo.
Avances en las técnicas de diagnóstico
Las nuevas técnicas de diagnóstico por imágenes son un importante aliado a la hora de detectar un gran número de afecciones reumáticas. En ese sentido, el Dr. Oscar Rillo, afirmó: “actualmente las técnicas de diagnóstico por imágenes, junto con el laboratorio especializado, podrían complementar a los hallazgos clínicos y tener un lugar muy importante en el diagnóstico de la artritis temprana”.
La Dra. Alma Grinstein, jefa del Servicio de Imágenes del Hospital Pirovano confirmó: “las diferentes técnicas de diagnóstico por imágenes juegan un papel fundamental en el diagnóstico y seguimiento de los pacientes con enfermedades reumatológicas. El avance tecnológico en los ultrasonidos, y en la resonancia magnética, posibilitan realizar diagnósticos en etapas más precoces, lo que permite modificar el curso de la enfermedad a través de tratamientos más tempranos y controlar en forma más precisa la respuesta al tratamiento”, y agregó: “La ecografía musculo esquelética con traductor de alta frecuencia, por ejemplo, resulta una herramienta de gran ayuda para el reumatólogo y ha permitido un importante avance dada su capacidad para la evaluación y diferenciación de las distintas estructuras comprometidas, en la cuantificación del proceso inflamatorio, la documentación del compromiso subclínico y el monitoreo de la respuesta al tratamiento. Es un estudio de bajo costo operativo, inocuo, que permite estudiar múltiples regiones articulares en una misma consulta y repetirlo cuantas veces sea necesario”.
“Con la radiología convencional sólo se ven algunas lesiones articulares en 1 de 4 pacientes. Pero con estas técnicas ecográficas, se podría detectar lesiones en más de la mitad de los afectados”, concluyó el Dr. Rillo.
AR: Juntos por esta causa
La artritis reumatoidea es una enfermedad de preocupación mundial, por eso, más de 40 organizaciones dan apoyo a “AR: Juntos por esta causa”, una iniciativa educativa global que proporciona herramientas y recursos para ayudar a cerrar la brecha de conocimiento sobre la artritis reumatoide. Instrumentó durante el 2013, en América Latina, una encuesta para medir el grado de conocimiento que tenían los pacientes con dicha enfermedad y como era vivir con ella. Se concluyó que en Argentina los pacientes experimentan los síntomas de la AR en un promedio de 11.9 años y que en América Latina las personas pasan hasta dos años sin un diagnóstico certero. Para más información visite: http://www.arjuntosporestacausa.com/