El cáncer de próstata es uno de los cánceres más frecuentes en los hombres a nivel mundial. En Argentina, según el Observatorio Global de Cáncer de la Organización Mundial de la Salud, se estiman más de 11.000 nuevos casos anuales, que representan el 20% de todos los tumores malignos en varones. En el Día Mundial del Cáncer de Próstata, se destaca la importancia del diagnóstico precoz y los avances en los tratamientos que permiten preservar la calidad de vida de los pacientes por más tiempo.
El cáncer de próstata afecta principalmente a personas mayores de 65 años y muchas veces es difícil de prevenir debido a ciertos factores de riesgo, como la edad o los antecedentes familiares. Además, este tumor suele crecer muy lentamente, por lo que a menudo no presenta síntomas de forma temprana.
Se estima que en América Latina el 40% de los pacientes con cáncer de próstata se diagnostican en etapas avanzadas de la enfermedad.
Si bien aún no existe una cura, las terapias innovadoras mejoran las expectativas para pacientes con cáncer de próstata en etapa metastásica, ya que limitan el dolor, y retrasan el deterioro del estado general del paciente, preservando durante más tiempo su calidad de vida. Más importante aún, demostraron reducir el riesgo de muerte y retrasar significativamente la progresión de la enfermedad.
Los especialistas enfatizan la importancia de acudir al médico y realizar los exámenes preventivos en hombres de más de 50 años o a partir de los 45 si existen antecedentes familiares. Los estudios consisten en la realización de un análisis de sangre para medir el Antígeno Prostático Específico (PSA) y en un examen digital a través del recto.